Durante sus primeros 100 días de trabajo hemos podido constatar el giro profundo que Pedro David Rodríguez Villegas está imprimiendo en su nueva gestión como titular del Gobierno de Atizapán de Zaragoza –tanto en la privilegiada Zona Esmeralda como en el resto del municipio.
Él no quiere ni tiene que mencionar la abismal diferencia entre su administración y la de quien lo precedió, Ruth Olvera Nieto. Porque ha sido más que evidente desde los primeros meses.
URBE ESMERALDA presentará el avance y cumplimiento de las promesas con que el actual Presidente Municipal se comprometió en su campaña. Y empezaremos con el resultado que hasta el momento más gusto nos ha dado: la recuperación de Presa Madín.
TESORO DE LA ZONA ESMERALDA
Contaminada con toneladas de basura y escombro, abandonada a su suerte y cubierta por los lirios acuáticos que se alimentan de suciedad orgánica, nuestra presa fue uno de los problemas fundamentales por atender en el proyecto de Rodríguez –junto con la seguridad y el combate a la corrupción.
El Alcalde encomendó la tarea de rescate al Director General de SAPASA, Alfredo Vázquez González, quien recibió la instrucción de cumplir el objetivo en no más de tres meses.
¿Limpiar 190 hectáreas sobre el agua en tan corto tiempo? Nada fácil. Pero el funcionario se puso manos a la obra y contagió con su entusiasmo a todo el equipo de trabajo hasta lograr lo inimaginable: retirar 650,000 toneladas de lirio… ¡en sólo 58 días!
“Pudimos hacerlo en tiempo récord, siguiendo las órdenes de nuestro Presidente Pedro Rodríguez, quien prometió rescatar la emblemática Presa Madín del abandono en que se encontraba. Y misión cumplida. Nunca antes en la historia de Atizapán se había llevado a cabo una empresa de esta magnitud y en tan poco tiempo: limpiar toda la presa para que luzca hermosa y vuelva a ser un orgullo de los atizapenses, ¡pero aquí está el resultado!”, dice Alfredo Vázquez con energía.
“En los recorridos con el dron, como parte de este Programa de Limpieza y Conservación, hemos podido ver alguna garza. Fue una sorpresa, pero yo creo que la naturaleza va llamando a esta fauna, que antes la habitó y fue siempre de nuestra Presa Madín”, concluye el entusiasta director de SAPASA.
Ahora sus pendientes son las 33 descargas clandestinas de “aguas crudas y residuales” que contaminan la presa –24 provenientes de Naucalpan–, entre las cuales dos pertenecen a los fraccionamientos Lago Esmeralda y Bosque Esmeralda.
UN FUTURO PROMETEDOR
Desde el 30 de Enero pudimos ver cómo el propio Alcalde y las cuadrillas de SAPASA empezaron a extraer de la Presa Madín el lirio con palas y grúas mecánicas, recolectores náuticos y otras herramientas, en una labor que parecía imposible. Sin embargo, el trabajo ininterrumpido hizo que en pocas semanas se vieran los avances.
El jueves 7 de Abril por fin se logró el objetivo. Justo el Día Mundial de la Salud, como para devolvérsela simbólicamente a nuestra presa.
No obstante, el Alcalde Rodríguez Villegas tiene una visión de futuro aún mayor, que aprovechará el extraordinario cuerpo de agua para convertirlo en un espacio especial: un destino en sí mismo.
Lo explica así el Director de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, Ramón Jarquín Rodríguez: “En el plan del municipio estamos considerando a la Presa Madín como un polígono de mejoramiento y aprovechamiento humano, al que se incorporará el uso de suelo que permita realizar caminatas, contar con un paisaje más integrado, e incluso ofrecer espacios de contemplación que funcionen como áreas de descanso”.
Si estos planes del nuevo Gobierno Municipal siguen cumpliéndose, en URBE ESMERALDA pronto volveremos a disfrutar paseos en kayak, observaremos patos, garzas, palomas u otras aves, y quizá hasta podremos ir muy temprano, pacientemente, a pescar una trucha –una “trompuda”, así les dicen los ejidatarios del Pueblo de Chiluca.
Como afirma Pedro Rodríguez: “Hemos rescatado la Presa Madín, ícono natural de nuestro municipio para que vuelva a brillar. Queremos cuidarla y convertirla en un desarrollo ecoturístico de Atizapán de Zaragoza, un municipio que va para adelante y quiere crecer de forma ordenada y segura. Para que quienes vivimos aquí nos sintamos verdaderamente orgullosos de ser atizapenses”.